Lo bueno de la nueva secundaria

Una de las cosas buenas que puede traer la nueva organización de la secundaria es la “continuidad institucional”. El polimodal tenía el gran inconveniente de no tener al alumno mucho tiempo en el colegio. Era una educación Media donde los alumnos solamente estaban tres años. Muy poco tiempo para que los chicos desarrollen un sentido de pertenencia a una institución y muy poco tiempo para lograr proyectos a largo plazo.

En el polimodal los alumnos llegaban desde distintas EGB a primer año, se necesitaba todo un año para la adaptación, e incluso parte del segundo año. Cuando el alumno se adaptaba a la escuela ya había pasado casi la mitad del tiempo total de permanencia en la escuela.

Una secundaria de seis años en una sola institución es un tiempo interesante como para hacer una planificación pedagógica a largo plazo, tener al alumno seis años podrá dar al docente y a los directivos tiempo suficiente para apuntar a un proyecto institucional. Seis años no es poco, permitirá  que el alumno pueda incentivarse más con ciertas cuestiones. Un ejemplo son los centros de estudiantes. Recuerdo que en cierta ocasión unos alumnos de un segundo año me preguntaron sobre cuestiones de organización de los centros de estudiantes, cómo implementarlos, cómo redactar una plataforma mínima, etc.

Ese año los chicos de ese segundo se pasaron todo el tiempo pensando qué hacer. Al año siguiente, cuando me los encontré en los recreos del colegio les pregunté qué había pasado con el centro de estudiante que estaban organizando, y la respuesta fue: “¿Ya fue profe, para qué si ya este año terminamos…”?.

A esto me refiero, una secundaria de seis años podrá dar mucho más tiempo para cuestiones como estas y para otras tantas.

Claro que para llegar a esa escuela de seis años falta mucho, faltan las unificaciones entre las viejas EGB y las escuelas medias. Fusiones que deberían estar a esta altura ya definidas pero que en la gran mayoría de los casos recién el año que viene se van a implementar, no sin antes sufrir en el proceso.

A todo esto se sumarán para el año próximo muchas dudas. En las fusiones de instituciones ¿habrá desplazamientos de directivos? ¿Qué pasará con las reubicaciones de los docentes? Con el cambio de currículum ¿habrá profesores que perderán horas? Lo concreto es que van a desaparecer los ECI y muchos docentes van a perder módulos. Yo mismo soy un ejemplo. En 2011 desaparecerá mi ECI de un segundo de polimodalito, allí donde hice una de las encuestas que mostré en el blog. Yo ya sé que pierdo dos módulos porque los ECI son en su mayoría horas provisionales….

Esta “nueva secundaria” recién se encuentra a mitad de camino. Recién en cuatro años se podrá tener una verdadera dimensión de cómo quedó el “nuevo sistema”. El entrecomillado de “nueva secundaria” y “nuevo sistema” no es casualidad. El entrecomillado es porque en el fondo no va a haber cambios sustanciales, es lo que creo, es lo que dejé expresado en los últimos artículos. En el fondo serán nuevos maquillajes. Un verdadero cambio del sistema educativo deberá pasar por otro lado. No solamente por un cambio de nominación de la escuela media y un cambio en algunas materias. No se mejora el sistema educativo solamente con remplazar “el EGB y el polimodal por la nueva secundaria”. Un verdadero cambio de sistema tiene que ir acompañado de una profunda planificación educativa a largo plazo. Darle sentido a la educación, acompañado de una mejora de los índices sociales. Esta nueva secundaria no tiene nada que ver con un cambio estructural, es más de lo mismo…

Y no se sorprendan si dentro de cuatro años, cuando se termine de implementar la “nueva secundaria” se deje pasar otros tres o cuatro años para que otra vez vuelvan otras reformas, es lo que paso desde la ley federal de 1993. Desconcierto total. Caos. Es la Argentina que tenemos…

Hasta pronto

SERALE